Databac

Difusión o poligénesis - antología.

Publié le 06/12/2021

Extrait du document

Ci-dessous un extrait traitant le sujet : Difusión o poligénesis - antología.. Ce document contient 1060 mots. Pour le télécharger en entier, envoyez-nous un de vos documents grâce à notre système d’échange gratuit de ressources numériques ou achetez-le pour la modique somme d’un euro symbolique. Cette aide totalement rédigée en format pdf sera utile aux lycéens ou étudiants ayant un devoir à réaliser ou une leçon à approfondir en : Astrologie
Difusión o poligénesis - antología. El descubrimiento del continente americano en el siglo XV dio origen a numerosas teorías sobre el origen de sus diferentes culturas y manifestaciones artísticas. En este fragmento se exponen las dos principales hipótesis que se debaten en la actualidad: la de los difusionistas y la de los americanistas. Fragmento de Arte y arquitectura en la América precolonial. De George Kubler. Introducción. La otra gran cuestión en los debates antropológicos recientes es la difusión de la cultura del Viejo Mundo al Nuevo. Existen dos corrientes de pensamiento: los difusionistas, que excluyen la posibilidad de la creación independiente: y los americanistas, que defienden la tesis de un origen independiente para las civilizaciones del Nuevo Mundo. El difusionismo ha tenido defensores desde el siglo XVI, cuando se pensó que los orígenes raciales de los pueblos amerindios se remontaban a las tribus perdidas de lsrael. La tesis del origen independiente se estableció poco después de 1840, por parte de F. Kugler en Alemania y J. L. Stephens en Estados Unidos. Los dos, cada uno por su lado, destruyeron los argumentos en favor del origen europeo del arte amerindio, al demostrar el carácter autónomo de las principales tradiciones artísticas, y al afirmar que los parecidos con el arte de otras reg...

« Difusión o poligénesis - antología. El descubrimiento del continente americano en el siglo XV dio origen a numerosas teorías sobre el origen de sus diferentes culturas y manifestaciones artísticas.

En estefragmento se exponen las dos principales hipótesis que se debaten en la actualidad: la de los difusionistas y la de los americanistas. Fragmento de Arte y arquitectura en la América precolonial. De George Kubler. Introducción. La otra gran cuestión en los debates antropológicos recientes es la difusión de la cultura del Viejo Mundo al Nuevo.

Existen dos corrientes de pensamiento: losdifusionistas, que excluyen la posibilidad de la creación independiente: y los americanistas, que defienden la tesis de un origen independiente para las civilizacionesdel Nuevo Mundo.

El difusionismo ha tenido defensores desde el siglo XVI, cuando se pensó que los orígenes raciales de los pueblos amerindios se remontaban a lastribus perdidas de lsrael. La tesis del origen independiente se estableció poco después de 1840, por parte de F.

Kugler en Alemania y J.

L.

Stephens en Estados Unidos.

Los dos, cada uno porsu lado, destruyeron los argumentos en favor del origen europeo del arte amerindio, al demostrar el carácter autónomo de las principales tradiciones artísticas, y alafirmar que los parecidos con el arte de otras regiones del mundo, como India o Egipto, podían explicarse como convergencias, más que como préstamos de lasfuentes del Viejo Mundo a los americanos. En nuestro siglo, el tema se abandonó durante una generación, más o menos de 1925 a 1950, cuando la tesis del origen independiente de las civilizaciones del NuevoMundo era la opinión ortodoxa entre los arqueólogos norteamericanos, bajo la dirección de A.

V.

Kidder en la Carnegie Institution de Washington.

Su hipótesis eraque América recibió a sus primeros pobladores, procedentes del noreste de Asia, hacia el final de la última glaciación, y que después se cortó la inmigración porcambios fisiográficos en el Estrecho de Bering.

Se creía que todas las civilizaciones amerindias se desarrollaron independientemente a partir de esta base paleolítica,sin posteriores influencias del Viejo Mundo.

El objetivo era probar que la especie humana, aislada en un entorno favorable al comienzo de su historia, habíadesarrollado espontáneamente culturas paralelas a las de otras razas humanas, sin deberles ninguna influencia histórica posterior a la base paleolítica original deconocimiento. Los defensores de la creación independiente nunca han negado la aparición de migraciones intermitentes a pequeña escala desde Asia o Europa, como las de losmarinos escandinavos a partir del año 1000 a las costas de Massachusetts y Rhode Island.

Pero han considerado estos episodios, con razón, como insignificantes enel gran marco de la evolución indígena.

Más importante es la ausencia de rasgos importantes del Viejo Mundo en el repertorio tecnológico de los pueblos americanos:rasgos como los caballos o los vehículos de ruedas.

Los difusionistas no han ofrecido ninguna explicación de estas ausencias. Este problema de los orígenes de las civilizaciones amerindias sigue siendo una de las grandes cuestiones abiertas de la historia del mundo.

Las secuencias unidas dela historia del Viejo Mundo no ofrecen oportunidad de comprobar la tesis de las tradiciones culturales distintas que surgen de orígenes independientes.

Sólo Américapresenta la posibilidad de defender la creación independiente.

De modo que debemos sopesar cuidadosamente cualquier afirmación que pretenda resolver la cuestión.No podemos poner a prueba aquí las evidencias raciales y agrícolas, pero debemos estar listos para poner en duda las comparaciones visuales en las que los nuevosdifusionistas han basado ciertos argumentos recientes. Por ejemplo, Ekholm ha supuesto que floreció un centro de influencias asiáticas a partir del siglo VIII d.

de C.

en la frontera occidental de los pueblos mayas, quetrajo a Mesoamérica rasgos importados del arte y la arquitectura del sureste de Asia.

Sin embargo, casi para cada una de estas formas existe un origen posible en elViejo Mundo.

El arco trifoliado de la arquitectura maya no sólo aparece en Pakistán occidental alrededor del 400 d.

de C., sino también en la arquitectura islámica yen el románica.

El edificio en miniatura en el interior de un templo no sólo existe en Ajanta, India, sino también en la arquitectura helenística.

Las formas del árbolsagrado o de la cruz tienen una significación evidente en el arte cristiano primitivo, además de tenerla en los ejemplos de Java o Camboya presentados por Ekholm.Las escenas cortesanas como las de Bonampak o las de Piedras Negras son corrientes en el arte bizantino.

Las decoraciones de columnatas en las fachadaspertenecen al arte románico además de a los templos Khmer.

Las galerías abovedadas son de Micenas además de Camboya.

Las formas de serpiente, figuras deatlantes y estatuas fálicas no se limitan al sureste de Asia, sino que aparecen una y otra vez por todo el Mediterráneo antiguo.

Las puertas enmarcadas por bocasmonstruosas representan en el arte cristiano las puertas del infierno.

La figura de Chacmool puede compararse a los dioses fluviales clásicos, y no sólo a las figurasde Brahma.

En otras palabras, para casi todos los ejemplos mencionados en esta lista, también se puede proponer un equivalente en la Europa antigua.

La tesis delorigen asiático se diluye fácilmente hasta abarcar todo el Viejo Mundo, y el «centro» asiático pierde precisión. Al mismo tiempo, estas formas pertenecen a tipos iconográficos americanos autónomos.

La famosa comparación entre los rollos de bronce de las dinastías Shang oChou y los rollos en las vasijas del valle de Ulúa, del 1000 d.

de C., señalada por primera vez por C.

Hentze y revivida una generación después por M.

Covarrubias,es uno de estos casos.

Los rollos chinos de bronce pertenecen a una serie iconográfica; los rollos del valle de Ulúa pertenecen a otra serie.

Ambas series parten defuentes distintas para converger en una semejanza casual que ha llevado a engaño a todos los estudiosos que no conocían las series tipológicas separadas queafectaban a cada término de la comparación.

El argumento es como suponer una estrecha relación de sangre entre personas que se parecen, aunque con muchos siglosde diferencia, de razas diferentes y continentes distintos.

El parecido es accidental, y no puede usarse para establecer una relación genética sin otras pruebas. Fuente: Kubler, George.

Arte y arquitectura en la América precolonial. Madrid: Ediciones Cátedra, 1986. Microsoft ® Encarta ® 2009. © 1993--2008 Microsoft Corporation.

Reservados todos los derechos.. »

↓↓↓ APERÇU DU DOCUMENT ↓↓↓

Liens utiles